¿Día del Hermano?

Se sabe que en varios países, incluída Argentina, el 4 de Marzo es el Día del Hermano. Pero parece que nadie sabe el por qué se celebra este dia en esta fecha.
Según lo que averigué el 5 de Septiembre se celebra el Día del Hermano, en homenaje a la Madre Teresa de Calcuta.

Pero aprovecharé la fecha estipulada en nuestro país para hablar de los hermanos, y dedicarle este post a los mios: Mariana y Gonzalo.

A los dos los vi nacer. El día que nació mi hermana fue todo un acontecimiento, era mi primera hermana. Me acuerdo que mi papá me despertó muy temprano y fuimos a ver a mi mamá al sanatorio. Ahí estaba, super chiquitita. Le había llevado un gatito de peluche de regalo, blanquito con el pechito rosa, y recuerdo que eran casi del mismo tamaño. Desde ese día que la vi por primera vez, y aunque confieso que a veces cuando agarraba mis cosas la quería matar, siempre la quise, la quiero. Desde ese día la vi crecer . . . Me acuerdo los actos del jardín de infantes, especialmente uno que hacía la canción de La señora cucaracha. con un short de raso, que era de un piyama de mamá, y que le habíamos puesto lentejuelas, y la carita toda pintada . . . O cuando empezó primer grado, que antes de que el micro la viniera a buscar le saqué fotos en el balcón con su nuevo uniforme, y estrenando una mochila casi tan grande como su espaldita.
Los años pasaron . . . como dice el tema "Los años pasan y nos vamos poniendo viejos". Y aunque ya es toda una mujer, sigue siendo mi hermanita.

Como les contaba antes, estuvimos las dos solitas por cuatro años, que fue cuando nació mi hermano, Gonzalo, el varón de la familia. Vino a agitar un poco la casa, con sus espadas y patadas de karate solía pegarnos encarnando a algún personaje como Lion de los Thundercats, o Heman. Pero también nos hacía reir mucho con sus imitaciones a Johnny Tolengo. Al igual que a Mariana, lo vi crecer, e ir pasando por las diferentes etapas: Jardín de infantes, primeria, secundaria, universidad . . .

Durante muchos años compartimos muchísimas cosas, crecimos juntos. Y aunque cada uno ahora vive en casas diferentes (aunque cerca una de otra), siempre están presentes. No pasa un día sin que piense en ellos. Son dos personas increíbles, a quienes amo muchísimo. Y como le dicen a los novios al contraer matrimonio: prometo amarlos, cuidarlos, en la salud y en la enfermedad . . . hasta que la muerte nos separe.

¡Los quiero hermanitos! ¡Feliz Día!